México, D. F., a 22 de noviembre de 2012.- La situación del transporte en la Ciudad de México está
lejos de resolverse sólo con la renovación de la flota vehicular. Hacen falta
también compromiso, responsabilidad y voluntad política de las autoridades del
transporte del Gobierno del Distrito Federal para diseñar, cumplir y hacer
cumplir los ordenamientos que permitan tener una mayor y mejor movilidad en la
metrópoli, expresan los miembros de la agrupación Transportistas Unidos del
Distrito Federal (TUDF).
Los concesionarios del transporte en el Distrito Federal
refrendan su compromiso con la modernización del transporte, con una operación
vial más responsable y un mejor trato al usuario. “El cambio está en marcha,
sin embargo, el transportista tiene la carga más pesada, la de los costos, lo
que ha impedido —desde hace 20 años cuando se hizo la primera y mayor
renovación vehicular al pasar de autos y combis a microbuses— una renovación
como la que se merece la ciudad; nosotros queremos, pero el rezago en la tarifa
nos lo impide”, destacó el vocero de la agrupación, Nicolás Vázquez.
Si en aquellos años pasar de los autos y combis a los
microbuses significó un gran sacrificio para los transportistas, hoy el
esfuerzo es aún mayor, pero “nos la jugamos si están dadas las condiciones de
regulación del transporte que nos permitan un funcionamiento, donde el paso de
hombre-camión a empresa signifique un paso adelante, no nuestra desaparición
por la carencia de certeza jurídica y económica”, expresó Vázquez.
Los concesionarios destacan la necesidad de contar con una
verdadera regulación del transporte por parte de las autoridades encargadas del
sector, necesaria para agilizar los traslados y bajar los costos de operación.
Es decir, que se apliquen las normas de vialidad para realmente ofrecer una
movilidad ágil y eficaz para el usuario.
“Se necesitan los condiciones necesarias y suficientes para
poder prestar el servicio con la calidad merecida por los usuarios de esta
ciudad. Y aquí viene el debate: ¿qué es primero, el huevo o la gallina? Porque
nos dicen que aumentan el pasaje si cambiamos nuestras unidades… muchos
compañeros cambiaron y hoy están ahorcados económicamente por la falta de una
tarifa justa y no castigada por asuntos de carácter político-electoral, que
mantienen un rezago de 20 años”, abundó el dirigente transportista.
Más de 60 rutas de concesionarios integrados en
Transportistas Unidos del Distrito Federal exigen, tras haber iniciado la
renovación del transporte hace casi cinco años, un incremento en la tarifa en
la ciudad de México no menor a 2 pesos para poder prestar un servicio digno de
la ciudad de México, puesto que el incremento acumulado de 10 centavos anuales
—con sus respectivo rezago histórico— sólo provocó la chatarrización del parque
vehicular que hoy aún rueda en la ciudad.