lunes, 6 de agosto de 2012

Columna

Reflexiones
Por Francisco Alfaro Ramírez

MÉXICO EN LA GLOBALIZACIÓN

El espejismo de una nueva manera de vivir gracias a la globalización hace que algunos grupos intenten adherirse a un sistema que en México es casi imposible.

Globalizar no significa que seamos modernos, que las condiciones en las que vivimos cambien de la noche en la mañana, que podamos adaptar la tecnología y ajustarla a las condiciones que existen en México.

Hoy aun vemos en el campo mexicano a los campesinos arar sus tierras con arados jalados con caballos, vacas, o arrastrados por personas, conocer y saber de los adelantos técnicos y científicos no los hace accesibles a la población que los necesita, y por supuesto el campo de nacional ha sido y está siendo abandonado continuamente, las tierras de cultivo han sido convertidas en unidades habitacionales, con lo que la posibilidad de la independencia alimenticia se aleja cada día más, acercándonos a comprometer nuestro futuro como nación puesto que seremos rehenes por hambre.

Los recursos de las naciones se están acabando, sus materias primas son un botín muy importantes para las fabricas procesadoras de países industrializados. México no es un país industrializado, esta atorado en épocas feudales, de con gobiernos y gobernantes primitivos, con poblaciones con gran empuje pero que se encuentran a merced de la ambición de los gobiernos corruptos, que han sido capaces de saquear el país, endeudarlos y devaluar la moneda nacional, para luego hablar de austeridad, de sacrificio, de acciones del extranjero, de factores externos ajenos a ellos, evitando evidenciar su ineptitud para administrar y hacer planes y proyectos en beneficio de la nación, siempre se equivocan a su favor.

La globalización no se puede dar mientras unos vallan a pie y otros en aviones, mientras unos sean productores de tecnología y otros países como el nuestro consumidores de tecnologías, con lo que nuestros recursos económicos salen del país, esto debido a que no exportamos tecnología ni ciencia ni productos procesados. Para el gobierno en general debemos ser maquiladores, exportadores de materia prima, conformarnos con miserables salarios, aceptar la educación actual con todas sus deficiencias, aceptar gobiernos dirigidos por ignorantes convenencieros sin raíces ni compromisos, aceptar la depredación de nuestra tierra, aceptar la violencia de la delincuencia promovida por los gobiernos, esto debido a su ineficacia para impartir justicia y resolver crímenes, pues sus mandos policiacos están repletas de extorsionadores, secuestradores, narcotraficantes, junto con algunos policías corruptos.

¿Esperamos la justicia global? Ser invadidos o  a algún gobernante extranjero, de hecho tenemos gobernantes que piensan como extranjeros, por eso no les importa perjudicar y hacer compromisos con gobiernos extranjeros, comprometiendo el presente y el futuro de todos los mexicanos.

Por lo que de nada nos sirve la globalización sin que los mexicanos podamos recibir los beneficios que genera una economía que crece con el esfuerzo de la población trabajadora, con industrias de todo tipo, con riqueza repartida de manera justa, sin que las fronteras sean la puerta abierta de par en par para que entre chatarra, armas y productos baratos y de mala calidad.

México merece una mejor población, empleos, más educación, pero sobre todo gobiernos nacionalistas, que vean el interés del pueblo por sobre las presiones internacionales.

La pregunta es: ¿Podemos ser mejores mexicanos?       
Por supuesto tú tienes la mejor opinión.