lunes, 18 de junio de 2012

Columna

Reflexiones
Por: Francisco Alfaro

120 MIL VIOLACIONES AL AÑO EN MÉXICO. (SOLO LAS DENUNCIADAS)
En el país existe la estúpida idea de que la mujer provoca, e insta al animal violador para atacar y aprovecharse de una persona más débil, incluso dentro de su propia familia, como hermanas, primas, sobrinas, nietas e hijas.

Senadores, diputados, ministerios públicos, instituciones educativas, e instituciones religiosas no ven esto como un síntoma claro de violencia cometido contra un grupo vulnerable ni como un problema social, a sabiendas que un acto de estos genera un conflicto muy grande en la persona que sufre tal agresión, no existen medidas de prevención ni acciones efectivas en contra del agresor, pues sería atentar contra sus derechos humanos.

En México existen grupos conservadores que por tradición mantiene opiniones muy respetables y cuestionables pero con acciones que rayan en la animalidad, con una población con doble moral, que influenciada por una mal entendida religión y unas leyes que al parecer fueron hechas para ignorarse y  para ser violadas constantemente por gobernantes y ciudadanos, promueve el dejar hacer para que nos dejen hacer, así no hay motivo para ningún reclamo.

La decencia obliga a denunciar aunque valla en ello la vida, como el caso de muchos reporteros desaparecidos, asesinados, o amenazados, recordemos el caso de Lidia Cacho y el gobernador precioso Mario Marín, donde la impunidad por la investidura que poseía le dio el fuero para evadir cualquier ley, mostrando que, como siempre no existe  real justicia en México. Pueden poner nuevas leyes, reformar las ya existentes y con esto estar satisfechos, por el supuesto trabajo legislativo, pero sin su aplicación correcta, y con los recovecos que los inteligentísimos legisladores dejan en las leyes, hacen posible la brutal burla de las leyes de México.

En al país existen grandes contrastes y un grave problema de impunidad, coludidas autoridades fácticas, gobernantes, población conservadora, y bestias con disfraz de persona, que aun son capaces de preguntar si la persona violada no provoco al violador, por la forma de vestir, o por coqueteo, o por cualquier otra barbaridad que se les ocurre aun que la violada sea una niña o un niño, así que la persona violada tiene que sufrir doble agresión, ya que las autoridades hacen justicia siempre y cuando aflore un apoyo o incentivo económico para que hagan su trabajo.

Bajo este marco de corrupción, impunidad, cinismo y violencia el país abordo el siglo XXI con muchas personas con pensamientos de siglos anteriores, que por ignorancia, por miedo, por tradición, por conservadurismo, y falta de conciencia criminalizan a la persona violada. Las preguntas son: ¿Habrá un día justicia en México? ¿Recibirán castigo los violadores? ¿Algún día tendrán conciencia nuestros gobernantes?
Como siempre tú tienes la mejor opinión.